Koundé salva al Barça con un doblete de cabeza y mantiene viva la lucha por los octavos.


Un doblete de cabeza de Jules Koundé rescató al Barcelona en su regreso a la Liga de Campeones en el Spotify Camp Nou. El lateral francés firmó los dos goles que permitieron al equipo de Hansi Flick remontar (2-1) ante un combativo Eintracht Fráncfort y sostener sus opciones de clasificación directa a octavos.
Ni Lamine Yamal, muy controlado por la defensa alemana; ni Raphinha, impreciso; ni Lewandowski, que no tuvo su mejor noche, lograron liderar el ataque azulgrana. Fue Koundé quien emergió como protagonista pese a no firmar su actuación más sólida en defensa. Su contundencia en el juego aéreo resultó decisiva para dar la vuelta al tanto inicial de Ansgar Knauff, que castigó a un Barça incómodo en la primera mitad.
Un Barça espeso y un Eintracht que ejecutó su plan
Flick introdujo tres cambios en el once: Lewandowski, Raphinha y Fermín López entraron por Ferran Torres, Marcus Rashford y Roony Bardghji, mientras Frenkie de Jong volvió a quedarse en el banquillo para mantener a Eric García como mediocentro.
El ambiente fue muy distinto al duelo de 2022 en cuartos de final de Europa League, cuando el estadio fue tomado por hinchas alemanes. Esta vez, el club reservó las entradas para los socios y el grueso de los cerca de 2.300 aficionados visitantes se ubicó en el segundo anfiteatro.
El Barça salió con intensidad y Lewandowski marcó un gol anulado por fuera de juego previo. Pero el Eintracht, consciente de su fragilidad defensiva en la Bundesliga, se blindó atrás y apostó por el contragolpe. La estrategia de Dino Toppmöller dio resultado: recuperó un balón tras un error de Lamine Yamal y Knauff cruzó el disparo con la zurda para abrir el marcador (0-1, min. 21).
El tanto desorientó al Barça, impreciso con el balón, nervioso en defensa y sin claridad en ataque. El 0-2 incluso estuvo cerca en otra contra liderada por Knauff, pero el remate de Skhiri se marchó alto antes del descanso.
El partido cambia en tres minutos
Con el equipo pidiendo cambios, Flick dio entrada a Marcus Rashford tras el descanso. El Barça, sin embargo, salió dormido y concedió dos llegadas claras del rival. Pero cuando peor estaba, Rashford lanzó un centro con efecto que Koundé cabeceó a la red para el empate. La reacción de la grada fue inmediata.
Apenas dos minutos después, un centro de Lamine Yamal encontró nuevamente al francés, que convirtió el 2-1 (min. 53) y dio la vuelta al marcador. En tres minutos, Koundé pasó de sufrir en defensa a convertirse en héroe.
El Barça ganó oxígeno y el Eintracht quedó descolocado, sin decidir entre defenderse o buscar el empate. Raphinha y Ferran Torres tuvieron oportunidades para sentenciar, pero la falta de puntería mantuvo el partido abierto hasta el final.
Una victoria necesaria, pero con dudas
El Barcelona, que mostró lagunas defensivas y un rendimiento irregular, se llevó tres puntos imprescindibles en la Champions. La noche, sin embargo, quedó marcada por la actuación de Koundé, cuyo doblete de cabeza evitó una nueva decepción europea.

